La cueva Huenul, ubicada a 20 kilómetros de Barrancas, en el norte de Neuquén, fue recientemente vandalizada. Este sitio arqueológico, considerado uno de los más antiguos de Sudamérica, alberga 444 pinturas rupestres de más de 8.000 años de antigüedad. Las autoridades locales decidieron restringir el acceso al público para preservar su valor patrimonial.
El hecho ocurrió esta semana, cuando se detectaron objetos abandonados y manchas de aceite sobre las pinturas. La Dirección de Turismo de Barrancas emitió un comunicado solicitando que nadie concurra por cuenta propia. A partir de ahora, será obligatorio contratar un guía y obtener una habilitación oficial para ingresar.
Patrimonio cultural en riesgo: medidas de protección
Elma Urrutia, directora de Turismo de Barrancas, explicó que la cueva Huenul no fue declarada atractivo turístico, sino patrimonio cultural. Por lo tanto, las visitas deben ser controladas. “Las pinturas son como el petróleo, no renovables. Si quedan dañadas, no se pueden recuperar”, advirtió.
La cueva, de difícil acceso, tiene 35 metros de largo, 18 de profundidad y hasta 5 de altura. En su interior también se hallaron restos fósiles de un oso perezoso, lo que refuerza su valor científico. El aumento de visitantes en los últimos años provocó un deterioro en su superficie original, lo que motivó la decisión de limitar el ingreso.

Vandalismo en sitios protegidos: un problema recurrente
Este no es un caso aislado. En julio, dos turistas fueron filmados realizando grafitis en piedras de Potrerillos, Mendoza. El hecho fue denunciado públicamente y derivó en una causa judicial. La jueza Viviana Fernández intervino de oficio, aplicando el artículo 138 quarter del Código Contravencional de Mendoza, que sanciona económicamente a quienes alteran el medioambiente en zonas protegidas.
La vicegobernadora Hebe Casado encabezó luego una jornada de limpieza en el área afectada, junto al Ministerio de Energía y Ambiente y la Fundación ProMontaña. Estos episodios reflejan la necesidad urgente de reforzar la conciencia sobre el cuidado del patrimonio natural y cultural.
Turismo responsable: clave para preservar el legado
Además de las sanciones, las autoridades buscan fomentar un turismo responsable. La Dirección de Turismo de Barrancas será la encargada de otorgar los permisos para visitar la cueva Huenul. La medida apunta a proteger las manifestaciones artísticas prehistóricas y evitar que el vandalismo continúe dañando un legado irrecuperable.
Por otro lado, se espera que estas restricciones sirvan como ejemplo para otros sitios arqueológicos del país. La preservación del patrimonio depende tanto de las políticas públicas como del compromiso ciudadano.