Según el informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), 1.377.810 turistas se movilizaron por el país durante el fin de semana largo por el Día de la Inmaculada Concepción, lo que representa un aumento del 43,5% respecto al año anterior. Aun con pronósticos de tormentas que afectaron a algunas regiones, la fecha se consolidó nuevamente como una de las más dinámicas del calendario turístico previo al verano.
La estadía promedio fue de 2 noches, levemente inferior a las 2,6 noches registradas en 2024, lo que refleja una tendencia hacia escapadas más breves y económicas motivadas por la caída del poder adquisitivo. El gasto promedio diario por turista se ubicó en $90.495, un 8,8% más en términos reales frente a 2023, lo que sugiere que los viajeros concentraron sus recursos en experiencias de mayor valor y en servicios esenciales. En total, el desembolso bruto alcanzó los $249.370 millones, con un crecimiento real del 20,1% respecto al mismo fin de semana del año previo.

En el acumulado del año se registraron ocho fines de semana largos, durante los cuales se movilizaron 13.342.750 turistas por el país. Estas escapadas generaron un movimiento económico estimado en $2.971.578 millones, equivalente a aproximadamente US$2.030 millones al tipo de cambio considerado por el informe.
El efecto de estos feriados fue significativo no solo por la cantidad de personas desplazadas, sino también por su capacidad de dinamizar economías regionales: el flujo de viajeros impulsó la demanda de alojamiento, gastronomía, transporte y servicios vinculados, beneficiando a miles de pymes locales.

Durante este último fin de semana largo, resultó notorio el traslado de turistas urbanos hacia centros turísticos tradicionales y emergentes. Desde CAME remarcaron: “La fecha volvió a consolidarse como uno de los momentos de movilidad turística previos al verano”.
En este sentido, empresarios y funcionarios prevén que la próxima temporada de verano superará los niveles de reservas y movimiento turístico registrados en enero y febrero de 2025. Hasta hace pocas semanas la cautela predominaba, en medio de la incertidumbre por la cantidad de viajeros que recorrerían el país, dado que las vacaciones se están planificando con muy poca anticipación.
Por otra parte, CAME resaltó que en los últimos meses, el turismo de compras de neuquinos hacia Chile cayó alrededor del 15% en comparación con el año pasado, según la Corporación para el Desarrollo Turístico de La Araucanía.
“Las medidas económicas nacionales, como la apertura importadora, la eliminación del cepo y la baja de impuestos, redujeron la diferencia de precios, desincentivando los viajes. Aunque siguen llegando turistas argentinos, la afluencia es menor que el año pasado y las reservas para Navidad y para Año Nuevo también disminuyeron”, explicaron.




