La defensa de Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”, intenta impedir su extradición a la Argentina, donde se encuentra imputado por el triple crimen de Florencio Varela, que tuvo como víctimas a Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez. El abogado del acusado, Marcos Sandoval, advirtió ante la Justicia peruana que, de ser enviado al país, la vida de su cliente podría estar en riesgo.
El planteo busca que Valverde Victoriano permanezca bajo custodia en Perú mientras se analiza su situación procesal. La defensa sostiene que el joven de 20 años sería blanco de represalias dentro del sistema penitenciario argentino debido al alto impacto público de la causa.
Un caso que conmocionó al país
Valverde Victoriano fue señalado inicialmente como el autor intelectual del triple homicidio, aunque con el avance de la investigación la hipótesis se reorientó hacia Joseph Freyser Cubas Zavaleta, conocido como “Señor J”, quien sería el verdadero instigador del crimen. Sin embargo, la Justicia argentina considera que “Pequeño J” tuvo una participación clave en los hechos.
Las cámaras de seguridad lo captaron junto a Lara Gutiérrez, una de las víctimas, horas antes del asesinato, lo que confirmó un vínculo directo con al menos una de las jóvenes.
La fuga y la captura en Perú
Tras el crimen, Valverde Victoriano logró escapar del país. Su detención se produjo en Perú cuando intentaba huir oculto en un camión de pescado, en una operación coordinada a partir del rastreo de su teléfono celular. Un audio enviado a su pareja, en el que reconocía estar “corrido” y preocupado por su situación, fue clave para su localización.
Actualmente se encuentra alojado en el Penal de Nuevo Imperial, en la ciudad de Cañete, una de las cárceles más conflictivas del sistema penitenciario peruano. El establecimiento, diseñado para poco más de mil internos, alberga cerca de dos mil detenidos, lo que agrava las condiciones de encierro.
A la espera de una decisión clave
“Pequeño J” permanece en un módulo preventivo mientras se define si Perú hace lugar al pedido de extradición solicitado por la Argentina. Desde su entorno legal insisten en que debe garantizarse su integridad física antes de cualquier traslado.
La resolución que adopten las autoridades peruanas será determinante para el futuro del expediente, que busca esclarecer uno de los crímenes más impactantes de los últimos años en el conurbano bonaerense. La causa sigue abierta y bajo fuerte seguimiento judicial y social.




