El Gobierno nacional anunció un fuerte recorte de subsidios energéticos que comenzará a regir desde enero, una medida que impactará directamente en los bolsillos de millones de hogares. La nueva disposición simplifica los beneficios, pero también elimina ayudas que antes recibían numerosos usuarios.
El plan elimina los niveles N1, N2 y N3, así como el Programa Hogar y la Tarifa Social de Gas como esquemas separados. Ahora solo habrá dos categorías: hogares con subsidio y hogares sin subsidio, definidos según ingresos, patrimonio y situación socioeconómica.
Según el nuevo criterio, solo recibirán ayuda los hogares con ingresos inferiores a tres Canastas Básicas Totales, equivalentes a $3.641.397. Quienes ya figuran en el RASE no deberán hacer trámites adicionales, aunque podrán actualizar sus datos mediante declaración jurada.
Quiénes pierden los subsidios
Se calcula que millones de usuarios del antiguo Programa Hogar verán reducida o eliminada la ayuda. Por su parte, los usuarios de gas propano y garrafas de 10 kilos podrán inscribirse desde enero en argentina.gob.ar/subsidios.
En electricidad, los hogares que califiquen tendrán un subsidio del 50% sobre un bloque de 300 kWh mensuales en meses de alta demanda y 150 kWh en meses templados. Para el gas natural, la bonificación del 50% se aplicará entre abril y septiembre, mientras que en los meses de menor consumo no habrá subsidio.
Durante 2026, el Gobierno aplicará una bonificación extra del 25% en enero, alcanzando 75% en electricidad y 25% en gas, que se reducirá progresivamente hasta desaparecer en diciembre.
Irregularidades detectadas
El Ministerio de Economía reveló que 2.590.000 usuarios recibían subsidios sin cumplir requisitos, incluidos 370.000 casos de personas fallecidas, además de 15.518 hogares en countries y clubes de campo que cobraban ayudas como si fueran de bajos ingresos.
El mensaje del Gobierno es claro: reducir el gasto público, aunque ello implique que muchos hogares queden sin asistencia, mientras se corrigen irregularidades en la asignación de subsidios. Para críticos y ciudadanos, la medida representa un nuevo golpe al bolsillo de los argentinos.




