Un nuevo hecho de inseguridad golpeó a una familia que reside en Pasaje Carlos Cossio al 2400, en una zona de monoblocks donde los vecinos aseguran que la tranquilidad se ve cada vez más vulnerada. Delincuentes ingresaron al acceso de un edificio y se llevaron una motocicleta que se encontraba estacionada en el palier.
El robo ocurrió este sábado alrededor de las 21:10. Según relataron los damnificados, que viven en el último piso del complejo, la motocicleta estaba guardada en el sector de ingreso del edificio, el cual cuenta con una puerta de seguridad que se cierra con llave.
De acuerdo a las primeras versiones, los ladrones habrían aprovechado un descuido —la puerta habría quedado mal cerrada o fue abierta por alguien ajeno— para ingresar sin forzar el acceso. Una vez dentro, se dirigieron directamente hacia el rodado, propiedad de la hija de la familia.
Si bien la moto tenía colocada la traba de volante, lo que impidió que pudiera ser encendida en el lugar, esto no fue un obstáculo para los delincuentes. Con total impunidad, sacaron el vehículo empujándolo hacia el exterior del edificio, sin importarles la presencia de personas en las inmediaciones.
El robo contó además con apoyo externo: al menos dos cómplices aguardaban en la calle a bordo de otras motocicletas, una Honda Wave de color negro y una moto de 150cc de color roja. Entre todos, escoltaron el vehículo sustraído mientras escapaban por las calles del barrio.
“Nos jodieron la vida. Ya no tienen límites, entran con gente afuera y no les importa nada”, expresó con indignación uno de los damnificados, quien además busca difundir las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la zona para poder identificar a los responsables.




