El Gobierno de Tucumán destinó cerca de $150 millones para la recuperación integral de los túneles de las calles Córdoba y Mendoza, una obra clave para mejorar la seguridad vial y dar respuesta a los reiterados problemas de filtraciones y anegamientos que se registraban desde su inauguración.
Los trabajos incluyeron la instalación de un nuevo sistema de iluminación LED, el recambio completo del sistema de bombas de drenaje y la incorporación de un generador eléctrico de respaldo, que permitirá mantener el funcionamiento ante eventuales cortes de energía. Con estas mejoras, se busca evitar inundaciones, especialmente en los sectores más bajos de los pasos bajo nivel.
La mayor parte de la obra ya fue finalizada. Solo restan tareas de pintura interior, que reemplazarán los murales originales por un diseño uniforme en color gris, y la demarcación vial, destinada a reforzar la seguridad en la circulación.
Detalles de la inversión
La intervención se ejecutó por administración, bajo la coordinación del Ministerio de Obras Públicas, y fue financiada con recursos provinciales. Del total invertido, alrededor de $60 millones se destinaron a luminarias LED, unos $35 millones al recambio del sistema de bombeo y U$S 17.000 a la compra de un grupo electrógeno.
Una obra con antecedentes complejos
Los túneles de Córdoba y Mendoza comenzaron a construirse a fines de 2013, durante la gestión de José Alperovich, luego de gestiones ante la Nación por tratarse de terrenos ferroviarios. El cruce de calle Córdoba fue habilitado en 2015 y el de Mendoza en 2017, ya bajo la gobernación de Juan Manzur.
Desde entonces, ambos pasos estuvieron marcados por filtraciones persistentes y problemas de funcionamiento, agravados por actos de vandalismo que afectaron tableros eléctricos y cañerías.
Más seguridad y mejor drenaje
El ministro de Obras Públicas, Marcelo Nazur, destacó la decisión del gobernador Osvaldo Jaldo de avanzar con la recuperación de estos accesos estratégicos al microcentro. Señaló que el objetivo fue garantizar condiciones de seguridad acordes a la ciudad y revalorizar un punto clave de circulación.
Además del recambio de luminarias en los túneles, se incorporó nueva iluminación en las pasarelas peatonales, se renovó la instalación eléctrica y se optimizó el sistema de emergencia y ventilación. El nuevo sistema de bombas permitirá un drenaje más eficiente, especialmente durante el verano, cuando las lluvias intensas suelen generar mayores complicaciones.
Por último, desde el Ejecutivo no descartan reforzar la seguridad en la zona para evitar nuevos hechos de vandalismo. La posible instalación de cámaras de vigilancia sigue en evaluación.





