La Comisión Nacional de Valores (CNV) publicó la Resolución General 1092, que establece que desde el 1° de diciembre de 2025 los Fondos Comunes de Inversión Money Market podrán destinar como máximo el 20% de su patrimonio a cauciones.
La decisión, impulsada por el Banco Central y respaldada por el Ministerio de Economía, busca proteger la transmisión de la política monetaria y reducir lo que consideran una “ineficiencia” en el uso extendido de estos instrumentos para fines transaccionales.
Impacto inmediato
- Ahorristas y billeteras digitales: Los usuarios de plataformas como Mercado Pago, Ualá o Personal Pay percibirán menores tasas en sus saldos, ya que los fondos deberán migrar parte de su liquidez hacia depósitos bancarios y títulos públicos, de menor rendimiento. Según PPI, la caída rondaría el 0,5% para los minoristas.
- Bancos: La medida es vista como un alivio, ya que recuperan flujo de depósitos y ganan margen para administrar su liquidez en un contexto de márgenes comprimidos.
- Banco Central: Reduce el costo de sus pasivos remunerados, al limitar el acceso de los fondos a cauciones.
- Fondos Money Market: Enfrentan una competencia distinta y deberán reorientar liquidez hacia instrumentos bancarios, lo que modifica su atractivo frente a clientes.
Contexto y cifras
- A principios de noviembre, el 26% del patrimonio de los Money Market estaba colocado en cauciones, sobre un total de $40.200 millones.
- Con el nuevo límite, unos $2.400 millones deberán migrar hacia depósitos a la vista o papeles del Tesoro.
- Las tasas de las LECAPs y BONCAPs ya reflejan el cambio, operando en rangos de entre 2,2% y 2,6% mensual.
Debate en el mercado
Especialistas como Belisario Álvarez de Toledo cuestionaron la medida, advirtiendo que “el que lo paga es el ahorrista”, ya que el rendimiento de los Money Market caerá mientras bancos y el BCRA capturan parte del spread.
La consultora Outlier recordó que estos fondos se consolidaron como herramienta transaccional en contextos de alta inflación, ofreciendo protección de valor. El nuevo tope obliga a los gestores a reevaluar estrategias para conservar atractivo frente a clientes.
Un cambio estructural
La norma redefine la competencia entre fondos y bancos, modifica la curva de tasas de corto plazo y afecta la operatoria diaria de empresas y particulares. El reordenamiento, con aval expreso del BCRA y Economía, impacta de inmediato en la dinámica de liquidez y en la rentabilidad del sistema financiero argentino.




