El titular de la firma, Sergio Gómez Sansone, explicó que la resolución se debe a la falta de prestación del servicio el pasado 6 de agosto. Ese día, los choferes habían realizado un paro que paralizó las unidades. Según el empresario, el conflicto con los trabajadores y la crisis del sector influyeron directamente en la situación.
Rayo Bus SRL ya venía acumulando una suspensión de 53 días antes de la medida definitiva. El Gobierno consideró que esa inactividad afectó gravemente a los usuarios que dependen de la línea. Además, remarcaron que el incumplimiento reiterado justificaba la caducidad.
Desde la Secretaría de Transporte se informó que se trabaja en la reestructuración del servicio. El objetivo es garantizar la cobertura de los recorridos que realizaba la Línea 131. Se prevé que otra empresa absorba el circuito en los próximos días.
Usuarios del transporte manifestaron su malestar por la falta de colectivos en las últimas semanas. Muchos vecinos de la zona norte aseguraron que tuvieron que buscar alternativas para movilizarse. “Esperamos que vuelva el servicio pronto, porque muchos dependemos de esa línea”, expresó una vecina del barrio El Bosque.
Mientras tanto, el Gobierno evalúa nuevas medidas para mejorar la frecuencia y control del transporte público. La caducidad de la Línea 131 se suma a otras sanciones recientes en el sector. Autoridades adelantaron que continuarán supervisando a las empresas para garantizar un servicio estable y seguro para los tucumanos.
