El dueño de la empresa constructora DICOZA SRL, de 48 años, continuará detenido tras la decisión judicial de extender su prisión preventiva por cuatro meses más. La medida fue solicitada por la Unidad Especializada de Usurpaciones, Estafas y Cibercriminalidad I del Ministerio Fiscal, representada por la auxiliar Carolina Brito Ledesma, debido a la persistencia de riesgos procesales como peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación.
La audiencia se celebró recientemente, y el juez actuante consideró razonable el pedido. El imputado está acusado de cometer estafas reiteradas en seis oportunidades, en concurso real y como autor directo. Su esposa, también imputada, permanece prófuga.
Según la teoría del caso, el empresario y su esposa se presentaban como socios de DICOZA SRL y celebraban contratos de construcción de viviendas y ventas de unidades funcionales. Aparentando solvencia, recibían pagos anticipados, terrenos y vehículos como parte de pago, pero no cumplían con las obras pactadas.
Las víctimas, que conocieron a la empresa a través de Facebook, confiaron en el servicio ofrecido y entregaron sus ahorros. Sin embargo, tras reiterados reclamos y evasivas, descubrieron que los arquitectos habían sido despedidos y que los acusados habían huido del país. El daño patrimonial estimado supera los $26.435.000 y US$222.000, además de la valuación de un terreno en el country Las Praderas.
La Fiscalía sostiene que el caso, declarado como complejo, sigue activo. Se han solicitado pericias caligráficas y contables al Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), y se continúa recabando documentación de las víctimas.
Además, se remarcó que el imputado fue encontrado en Brasil, lo que refuerza el riesgo de fuga. “El perjuicio no es sólo económico, sino también emocional. Muchas víctimas vieron frustrados sus proyectos de vida”, afirmó Brito Ledesma.
El caso sigue generando repercusiones. La prórroga de la prisión preventiva busca garantizar el avance de la investigación y evitar que el imputado obstaculice el proceso. Mientras tanto, la búsqueda de su esposa continúa, y las víctimas esperan justicia tras haber confiado en una promesa que nunca se concretó.
