La Subsecretaría de Medio Ambiente de Tucumán intensificó el monitoreo de la calidad del aire en la provincia, en el marco de un proyecto conjunto con el Laboratorio de Estudios Atmosféricos (LEA) de la UNT–CONICET. Actualmente funcionan 11 sensores de un total de 29, mientras el resto se encuentra en calibración o reparación. Los dispositivos están instalados en escuelas, comisarías y edificios públicos, y la información recolectada es validada por el LEA.
Desde 2021, Tucumán cuenta con la primera Red Híbrida de Monitoreo de la Calidad del Aire, impulsada por la iniciativa Breathe2Change. Además del control técnico, se realizan capacitaciones junto a la Mesa de Gestión Ambiental, dirigidas a ingenios, productores y comunidades educativas.
El subsecretario Facundo Moreno Majnach remarcó que la quema de cañaverales es un delito penal y una infracción administrativa. Según datos del INTA y la Estación Experimental Obispo Colombres, el 10% de las 300.000 hectáreas de caña implantadas fueron quemadas en la campaña actual, una cifra menor a la del año pasado. El gobierno sostiene una política de “tolerancia cero” frente a estas prácticas y promueve las Buenas Prácticas Agrícolas Local G.A.P.