El cáncer de mama es el tumor más prevalente a nivel mundial. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2022, en todo el mundo se diagnosticaron 2,3 millones de casos de cáncer de mama en mujeres, y se registraron 670.000 muertes por esa enfermedad.
En Argentina, según cifras de la Sociedad Argentina de Mastología, cada año se registran 22 mil nuevos casos de cáncer de mama y casi 6 mil muertes por este motivo. Sin embargo, en el 95% de los casos, el diagnóstico precoz permite acceder a tratamientos con altas chances de curar este tipo de tumores, que son los que más afectan a las mujeres.
Es por eso que los especialistas proponen pasar a la acción con dos herramientas tan simples como efectivas: respetar los chequeos de rutina y hacer una consulta rápida en caso de detectar una anomalía.
Estela Esquivel, referente del programa de Cáncer de Mama, encabezó este 1º de octubre en la Legislatura el acto inaugural del Octubre Rosa con un fuerte mensaje de prevención.
Del lanzamiento en la Legislatura estuvieron presentes el Secretario Ejecutivo Médico, Daniel Amado, Marcelo Montoya, subsecretario del Ministerio de Salud, la directora del PRIS, Noellia Bottone, la doctora Alejandra Matiacci, subdirectora del PRIS y Esquivel, referente del programa de Cáncer de Mama.

Sobre esto, la referente comentó: “Hemos dado inicio en la Honorable Legislatura al Mes Rosa, en el que realizamos la detección precoz con las mamografías, un estudio que salva vidas, ya que permite identificar imágenes muy pequeñas que la paciente aún no llega a palparse”.
En Tucumán, el estudio se encuentra disponible en todos los Nodos Rosa de la provincia, es gratuito y se realiza sin pedido médico en mujeres del grupo de riesgo, entre 40 y 70 años. Detectado a tiempo, las oportunidades de tratamiento y curación alcanzan el 95%.

En el marco del Octubre Rosa, Claudia compartió su experiencia como paciente diagnosticada con cáncer de mama, resaltando la importancia de la detección precoz, los tratamientos oportunos y la contención integral que brinda el sistema de salud.
“En la parte pública me hice los estudios de mamografía y ecografía mamaria, y gracias a Dios ahí me detectaron a tiempo. Inicié a la realización de los estudios médicos, el tratamiento y si es difícil pero no imposible”, relató.
Claudia ya completó su esquema de quimioterapia. Durante el proceso perdió el cabello, pero a través de una hermana que también transita la enfermedad conoció el Banco de Pelucas Oncológicas, donde recibió ayuda y contención.
“El equipo médico, los peluqueros y la doctora Esquivel me apoyaron muchísimo. Eso me hizo sentir mejor, tanto en lo anímico como en lo estético. Quiero pedirle a la gente que se acerque y done cabello. Uno nunca sabe si algún día le puede tocar vivirlo, como me pasó a mí y a mi hermana”, expresó.
“Lo mejor que nos puede pasar a las que transitamos esta enfermedad es sentirnos contenidas y acompañadas. Eso nos da fuerzas para seguir adelante”, finalizó.