Mar del Plata avanza hacia un esquema más estricto de playas libres de humo. A partir de la temporada de verano 2026, quienes sean sorprendidos fumando fuera de las áreas habilitadas en balnearios privados o concesionados deberán afrontar multas económicas de alto impacto. La medida refuerza una política iniciada en 2023 y que ahora entra plenamente en vigencia al cumplirse los plazos fijados por la normativa local.
La regulación se enmarca en una política que se viene consolidando desde hace más de una década. Todo empezó con la Ordenanza 20.104 de 2010, que prohibió fumar en ambientes cerrados. Luego, la Ordenanza 25.845, aprobada en 2022, extendió la restricción a las playas y obligó a los balnearios a implementar:
- Zonas libres de humo con señalización clara
- Sectores especialmente demarcados para fumadores
- Recipientes adecuados para depositar colillas
Con la puesta en marcha de las multas, el municipio apunta a garantizar el cumplimiento efectivo de estas disposiciones.
Dónde no se podrá fumar
La prohibición ya rige en:
- Balnearios privados y todas las concesiones
- Unidades Turísticas Fiscales administradas por el municipio
- Complejo Punta Mogotes y concesiones provinciales
Aunque aún no se oficializó, el Ejecutivo municipal mantiene abierta la posibilidad de extender la prohibición a las playas públicas durante las próximas temporadas.
Multas por fumar en playas no autorizadas
El nuevo esquema sancionatorio contempla multas que van desde el 0,15% al 1,5% del valor equivalente a 100 salarios mínimos municipales.
Tomando como referencia el salario mínimo municipal de septiembre (18 horas), fijado en $339.328,21, las multas oscilarán entre:
- Mínimo: $50.899
- Máximo: $508.992
El monto exacto dependerá de la gravedad de la infracción, según determine la autoridad de aplicación.
Por qué se toma la medida
La iniciativa tiene un triple objetivo para la temporada turística:
- Mejorar la calidad del aire en sectores recreativos muy concurridos.
- Reducir la contaminación por colillas, uno de los residuos más frecuentes en la costa.
- Promover hábitos saludables en residentes y visitantes.
ONG dedicadas al monitoreo ambiental remarcan que las colillas se encuentran entre los contaminantes más presentes en las playas, solo superadas por los plásticos.




