El Sindicato de Camioneros, liderado por Hugo Moyano, envió esta semana una nota a las cámaras empresariales para reabrir las negociaciones salariales. El gremio exige el pago de una suma no remunerativa en diciembre para compensar la pérdida del poder adquisitivo debido a la inflación del trimestre septiembre-noviembre.
Además, reclama un piso mínimo del 20% en los adicionales de especialidad para las ramas Logística, Expreso, Mudanzas y Correo Privado. Este pedido preocupa a las pequeñas y medianas empresas del sector, que advierten que no podrán afrontar el incremento sin afectar su operación.
El último acuerdo salarial, vigente desde septiembre hasta febrero de 2026, contempló un aumento total del 3,3%, distribuido en tres tramos: 1,2% en septiembre, 1,1% en octubre y 1% mensual de noviembre a febrero. También se pactó un bono de fin de año de 840 mil pesos por trabajador, a pagar en cuatro cuotas entre enero y abril de 2026, y la contribución a la obra social.
Aunque la paritaria estuvo alineada con la pauta oficial y fue destacada por el Ministerio de Capital Humano, Moyano argumenta que la inflación superó lo previsto. Por eso, exige un ajuste adicional para que los salarios no pierdan poder de compra.
El sindicalista también remarca la disparidad histórica en los adicionales de algunas ramas, que genera diferencias importantes entre los ingresos de los trabajadores de Logística, Expreso, Mudanzas y Correo Privado.
Este reclamo abre un nuevo capítulo de tensión entre el gremio y las pymes del transporte, que deberán decidir cómo afrontar los pedidos sin comprometer su viabilidad económica en los próximos meses.




