A una semana del asesinato de Federico Toledo, una multitud marchó en silencio desde avenida Sarmiento al 1200 hasta la Plaza Independencia. El joven había salido a divertirse con amigos cuando Santiago Leonel Budini lo atacó brutalmente, según la acusación.
Con velas encendidas, carteles con el rostro del acusado y abrazos interminables, familiares, compañeros del colegio San Francisco y vecinos transformaron el duelo en exigencia. A las 21:40, una bandera blanca y roja encabezó la movilización con un mensaje claro: “Justicia por Federico Toledo”. Debajo, en letras negras, la consigna fue contundente: “Exigimos condena efectiva para su asesino”.

Familiares y amigos de Federico Toledo marcharon exigiendo justicia. Foto: Tendencia de noticias.
La marcha terminó con un aplauso largo, sentido, que rompió el silencio aturdidor de la ausencia. Fue homenaje, fue grito, fue promesa colectiva de memoria y justicia.