Una joven usuaria de X, identificada como @im_anasofia2, compartió una historia que rápidamente se volvió viral: al no poder recibir su pedido por aplicación, decidió regalárselo al repartidor. Lo que parecía un simple gesto de cortesía terminó conmoviendo a miles de personas.
La conversación entre ambos fue publicada en una captura de pantalla. El repartidor, sorprendido, preguntó: “¿En serio me los puedo quedar?”. Ana respondió que sí, y el joven agradeció con humildad: “Tranquila, no hay problema, muchas gracias a ti”.
Ana quiso disculparse por no haber podido recibir el pedido y escribió: “Gracias y qué pena hacerte perder el tiempo”. Fue entonces cuando el repartidor le envió un mensaje que la hizo llorar:
“Tranquila, no es tu culpa. De hecho, tengo que agradecerte porque hoy es el cumpleaños de mi mamá y estaba trabajando para llevarle un detalle.”
Ese mensaje, cargado de humanidad y gratitud, tocó una fibra sensible en la comunidad digital. El tuit superó los 1,6 millones de visualizaciones y recibió más de 96 mil “me gusta”.

Reacciones en redes: empatía y emoción colectiva
Los comentarios no tardaron en llegar. Muchos usuarios compartieron su emoción:
- “Me puse a llorar por un desconocido”
- “Las cosas siempre pasan por algo”
- “Qué lindo gesto tuviste y qué lindo ver a la otra persona siendo agradecida”
Este intercambio, breve pero poderoso, se convirtió en un símbolo de empatía en tiempos de individualismo. Un simple acto de generosidad reveló una historia detrás del uniforme de delivery: la de un hijo que trabaja para sorprender a su madre en su cumpleaños.




