La Legislatura de Tucumán aprobó este jueves el pedido del Poder Ejecutivo para expropiar 18 fracciones de terrenos destinados a la construcción del nuevo Acueducto Vipos, una infraestructura considerada estratégica para garantizar el suministro de agua potable en el área metropolitana.
Los terrenos incluyen predios en Tapia y Villa Carmela, donde se instalarán cisternas para el acopio y distribución del recurso hídrico. La obra beneficiará a más de 500.000 habitantes de Yerba Buena, Tafí Viejo, Tapia, Villa Carmela y el sector oeste de San Miguel de Tucumán.
El legislador Gerónimo Vargas Aignasse calificó el proyecto como “estratégico para el futuro hídrico del Gran San Miguel de Tucumán” y destacó que será financiado con casi USD 100 millones por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en el marco del Programa de Gestión de Recursos Hídricos y Seguridad Hídrica.
También reconoció el rol del bloque Independencia —integrado por Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla— en las gestiones que permitieron al gobernador Osvaldo Jaldo destrabar el acceso al financiamiento con Nación.
Características técnicas y licitación
El acueducto captará agua del río Vipos mediante una toma mixta, superficial y subálvea, lo que garantizará estabilidad y calidad en el servicio. La conducción tendrá una extensión superior a 50 kilómetros y permitirá transportar un caudal estimado de un metro cúbico por segundo.
El presidente de la comisión de Obras Públicas, Tulio Caponio, informó que 10 empresas manifestaron interés en participar en la licitación, cuyas propuestas están en evaluación para definir la preadjudicación.
Críticas y contexto
Desde la oposición, el legislador Walter Berarducci (Compromiso Tucumán) señaló que la nueva infraestructura busca reparar años de desinversión tanto del Gobierno nacional como de gestiones provinciales anteriores. Recordó que el acueducto actual sufrió más de una docena de fallas que generaron pérdidas significativas de agua.
Vargas Aignasse agregó que hubo intentos de la Sociedad Aguas del Tucumán por recuperar la red existente, pero el deterioro estructural y la reducción en la capacidad de captación hicieron inevitable avanzar con una nueva obra.
Con las expropiaciones autorizadas, el Gobierno provincial espera acelerar los tiempos administrativos y habilitar el inicio de uno de los proyectos más importantes en materia hídrica de las últimas décadas.




