César González, secretario general de UTA Tucumán, denunció que la empresa Rayo Bus suspendió a 16 trabajadores de la Línea 131. El motivo: un “quite de colaboración” que los choferes realizaron en protesta por el pago fuera de término de sus salarios correspondientes a agosto.
González calificó la medida como arbitraria y aseguró que “es común en el señor Gómez no cumplir con las leyes ni con el convenio colectivo de trabajo”. El gremio rechazó legalmente las suspensiones y exigió la reincorporación inmediata de los trabajadores a sus tareas habituales.

Además, el dirigente advirtió que si la empresa no revé su decisión, UTA definirá nuevas acciones la próxima semana. “Los suspenden por reclamar derechos. No vamos a permitir que se vulneren las garantías laborales”, afirmó.
El conflicto se suma a una serie de tensiones entre el gremio y las empresas de transporte, en un contexto de crisis económica y demoras en los pagos. La situación podría escalar si no se alcanza una solución en los próximos días.