Este miércoles, Francia amaneció en medio de una jornada de alta tensión marcada por bloqueos, barricadas y enfrentamientos en respuesta al ajuste económico impulsado por el gobierno.
Desde las primeras horas, sindicatos, movimientos sociales y agrupaciones de izquierda iniciaron más de 700 acciones coordinadas en todo el país. Las principales ciudades —París, Lyon, Marsella y Rennes— fueron epicentro de cortes en autopistas, circunvalaciones y accesos urbanos. La consigna: “bloquear todo”.

En París, las fuerzas de seguridad intervinieron para mantener abierto el Boulevard Périphérique, arteria clave de la capital. Sin embargo, barricadas en accesos como la Puerta de Bagnolet y la Puerta de la Chapelle provocaron embotellamientos y detenciones. Según la Prefectura, al menos 75 personas fueron arrestadas en la región metropolitana.