San Martín de Tucumán enfrenta una cuenta regresiva cargada de incertidumbre. El plazo para presentar listas vence en 11 días, pero los principales referentes aún no definen sus candidaturas. La cautela domina los pasillos de La Ciudadela, donde los nombres circulan, se desmienten y reaparecen según las gestiones del día.
La crisis financiera del club condiciona cada movimiento. Los candidatos exigen conocer los números reales antes de comprometerse. La directiva saliente no transparentó los gastos, y sin esa evaluación, ningún proyecto puede avanzar con solidez.
Oscar Mirkin, expresidente, volvió a escena. Prometió definir su candidatura entre miércoles y jueves, según el resultado de gestiones para obtener fondos. Ya tiene los nombres de quienes lo acompañarían, pero evita comprometerlos antes de tiempo. Su prioridad es garantizar sustentabilidad económica con apoyo privado y asistencia del Gobierno.

Samuel Semrik confirmó su candidatura. Su espacio propone modernizar la gestión y proyectar un club sustentable. Aunque no reveló nombres, mantiene conversaciones con socios activos para fortalecer su estructura.
Gustavo García, bajo la agrupación “San Martín Primero”, también se suma a la carrera. Acompañado por más de 15 personas, busca ampliar su base de apoyo y no descarta alianzas con otros sectores. Plantea revalorizar la vida institucional, reforzar el sentido de pertenencia y ordenar la economía antes de encarar lo deportivo.
Augusto Rodríguez, desde “Modernicemos San Martín”, asegura que su lista está casi lista. Ya firmaron los avales y completaron la documentación exigida. Aunque evalúa una posible unión con otros espacios, confía en que una buena gestión de recursos puede sacar al club del endeudamiento y potenciar el complejo deportivo.
Nicolás Nasrallah mantiene diálogo con todos los sectores. Su candidatura depende de lograr un acuerdo de unidad para evitar una elección fragmentada que debilite al nuevo gobierno.
Daniel Galina definirá el domingo si presenta su lista. Su entorno analiza las condiciones generales del club antes de tomar una decisión final.
En paralelo, exdirigentes también expresaron su intención de aportar experiencia. La sensación general es que nadie quiere precipitarse. San Martín atraviesa una crisis institucional y económica que exige planificación prudente. Lo que hoy es silencio, en pocos días será definición.




