El presidente Javier Milei finalmente no viajará al sorteo del Mundial que se realizará en Washington el próximo viernes 5 de diciembre. La decisión se da en medio de su creciente enfrentamiento con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y fue confirmada por el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, a través de un posteo en redes sociales.
“El Presidente de la Nación ha decidido no realizar el viaje previsto para presenciar el sorteo del mundial de fútbol a realizarse el próximo 5 de diciembre en Washington DC”, comunicó Adorni.
La cancelación ocurre justo cuando la selección argentina será cabeza de serie y conocerá el grupo que enfrentará en la fase inicial de la Copa del Mundo 2026.
La decisión de Milei es interpretada como una respuesta silenciosa hacia Claudio “Chiqui” Tapia, titular de la AFA, con quien mantiene un conflicto abierto. En los últimos días, el mandatario respaldó públicamente a Estudiantes de La Plata, enfrentado con Tapia y con la dirigencia de Rosario Central, declarado campeón de la Liga Argentina.
En sus redes sociales, Milei compartió mensajes en apoyo al Pincha y referencias históricas a Osvaldo Zubeldía y Carlos Bilardo, ídolos de su visión “bilardista” del fútbol.
Las sanciones y el cruce con Verón
El Tribunal de Disciplina de la AFA sancionó a jugadores y directivos de Estudiantes, incluyendo a Juan Sebastián Verón, suspendido por seis meses de toda actividad vinculada al fútbol. Aunque la AFA aclaró que podría haber una amnistía para los jugadores, la medida no alcanzaría al presidente del club platense.
La respuesta de Tapia
Durante la gala de los premios Alumni en Ezeiza, Tapia habló por primera vez de la controversia:
“No es la primera vez que vivimos esto, pasaron tres presidentes en apenas nueve años que me ha tocado presidir el fútbol argentino y me quedan muchos años más”.
El dirigente, con mandato vigente hasta 2028, defendió la legitimidad de su gestión y lanzó críticas hacia Verón, recordando la clasificación de Estudiantes en el reducido.
Un conflicto que trasciende la cancha
El enfrentamiento entre Milei y Tapia expone la tensión entre la política nacional y la conducción del fútbol argentino. Mientras el Presidente evita mostrarse en el sorteo mundialista, Tapia reafirma su poder dentro de la AFA, en un escenario que promete nuevos capítulos en la relación entre la Casa Rosada y el fútbol argentino.




