Joaquín Girvau, Jefe de Policía, lanzó una frase que encendió la polémica: “Hay que estar loco para llevar detenidos para que construyan una casa”. La declaración, emitida en la jornada de hoy, se dio en el marco del escándalo desatado por los jefes de la Unidad Regional Norte que están acusados y denunciados de sacar presos para trabajar en una vivienda particular de El Cadillal.
El gobernador Osvaldo Jaldo encabezó una reunión con la plana mayor de la Policía. Al salir de la misma, Girvau, habló con los medios. «Estamos defraudados, obvio, pero nos hemos puesto a disposición de la Justicia. Tenemos tres sumarios administrativos en curso y ahora vamos a hacer un análisis completo con el Subjefe y el Director de Asuntos Internos. Si tienen quedando detenidos más policías, van a quedar».

En este sentido, agregó que «han defraudado a la institución policial, a este uniforme y al prestigio que se ha ganado la Policía de Tucumán. Había que tomar medidas y las tomamos ayer. Vamos a seguir con firmeza como venimos actuando siempre», remarcó.




