El llamado Crimen de la Chacabuco 59 avanza por el camino de la impunidad. Un tribunal de impugnación resolvió absolver a Leonardo Salomón, el único condenado por el asesinato de Ana Gabriela Picciuto, cuyo cuerpo fue hallado en la base de una cisterna dos meses después de su muerte. Los jueces cuestionaron la investigación y remarcaron que no se profundizaron otras líneas que podrían haber ayudado a esclarecer el caso.
El 12 de mayo de 2023, un obrero encontró el cuerpo de Picciuto en su vivienda de Chacabuco 59. Las pericias determinaron que había sido asesinada entre el 9 y el 11 de marzo de ese año, con golpes en la cabeza provocados por un objeto contundente que nunca fue hallado.
La investigación reveló que en la casa vivían varias personas con problemas de adicción y que la propiedad había sido vendida de manera irregular. Inicialmente fueron procesados los inquilinos Alfredo Socci, Natalia Liberman, Sofía di Cianni y el ex esposo de la víctima, Luis Fumero. Sin embargo, el fiscal Carlos Sale decidió sostener la acusación únicamente contra Salomón, quien mantenía una relación conflictiva con la víctima y había abandonado la provincia el 11 de marzo.
Los cuestionamientos de la defensa
El defensor oficial Hernán Molina impugnó el fallo que había condenado a Salomón a 15 años de prisión. Entre sus planteos señaló:
- No se probó el lugar del crimen, solo el sitio donde se ocultó el cuerpo.
- No se valoró correctamente la fecha de la muerte.
- No se halló el arma homicida ni rastros genéticos que vincularan al acusado.
- No se profundizaron otras hipótesis, como la participación de los inquilinos o el móvil vinculado a la venta irregular de la casa.
La decisión del tribunal
Los jueces María Jimena Suárez, Facundo Maggio y Agustín Puppio coincidieron en que nunca se demostró que Salomón haya discutido con la víctima y cuestionaron la falta de pruebas adicionales. Aunque desestimaron algunas teorías, remarcaron que la investigación fue incompleta y que no se exploraron todas las líneas posibles.
En su fallo, absolvieron a Salomón por el beneficio de la duda y señalaron que otros sospechosos solo podrían ser investigados si surgen nuevas pruebas, algo poco probable tras más de dos años del femicidio.
Hipótesis descartadas y otras irregularidades
El tribunal analizó y descartó la hipótesis de una pelea con una peluquera y la participación de los compradores de la vivienda. Sin embargo, coincidió en que hubo irregularidades en la operación inmobiliaria: Fumero, Walter Marchese y los hermanos Marín de la Fuente deberán ser investigados por esas maniobras, aunque no por el homicidio.
Un caso sin resolución
Los inquilinos Socci, Liberman y Di Cianni fueron sobreseídos y no podrán ser acusados nuevamente salvo que aparezcan nuevas pruebas. La absolución de Salomón deja al caso sin responsables y refuerza la sensación de impunidad en uno de los hechos más conmocionantes de los últimos años en Tucumán.




