La Justicia tucumana ordenó la aprehensión de Diego Luciano “Cachito” Fernández, el joven de 28 años que fue atacado por una jauría de 15 perros en Yerba Buena. La medida aún no se concretó porque el médico no firmó el alta hospitalaria, requisito para trasladarlo bajo custodia.
La fiscala María del Carmen Reuter lo acusa de hurto, luego de que se encontrara una mochila con naranjas en la casa de María Cristina Salinas, donde ocurrió el incidente. La propietaria declaró que Fernández saltó la tapia y causó daños, mientras que la madre del joven sostiene que él tenía permiso para ingresar y recoger fruta.
El ataque le provocó heridas graves y la amputación parcial de sus órganos genitales. Fue rescatado por vecinos y trasladado al hospital Carrillo, luego derivado al Centro de Salud.
El caso divide al barrio: algunos vecinos lo vinculan con robos y adicciones, mientras otros cuestionan la falta de previsión judicial. Fernández acumula 18 causas penales en nueve años, pero nunca fue condenado.