Once años después del crimen de Lucía Vanesa Jerez, la Justicia tucumana logró detener a Diego Maximiliano “El Elegido” Vila, acusado de haberla asesinado en diciembre de 2014. El arresto se concretó el 31 de octubre en una vivienda rural de San Pedro de Guasayán, Santiago del Estero, tras un operativo conjunto entre el ECIF y la División Homicidios local.
Vila fue trasladado bajo custodia a la capital santiagueña y luego extraditado a Tucumán. El juez interviniente ordenó prisión preventiva por tres meses, mientras la Unidad Fiscal de Homicidios I, a cargo de Pedro Gallo, avanza con la investigación.
El crimen de Lucía Jerez: una causa que estuvo al borde de la prescripción
El homicidio ocurrió el 4 de diciembre de 2014 en el barrio ATE. Según la reconstrucción judicial, Vila, entonces de 18 años, discutía en la vereda con dos menores mientras consumían drogas. Lucía Jerez, de 22 años, salió de la casa de su suegra para pedirles que se retiraran. En respuesta, recibió insultos y un disparo en el abdomen, ejecutado por Vila con un arma que le entregó uno de los adolescentes.
La joven fue trasladada al hospital Padilla, donde permaneció internada una semana antes de fallecer el 11 de diciembre. Desde entonces, el acusado se mantuvo prófugo, utilizando identidades falsas y moviéndose por distintas provincias para evitar ser localizado.
Investigación reactivada y camino hacia el juicio
La causa, que estaba próxima a prescribir, fue reactivada por el Departamento de Investigación Criminal del ECIF. A través de análisis de bases de datos e inteligencia criminal, los investigadores lograron ubicar al acusado y concretar su detención.
Durante la audiencia del 8 de noviembre, el auxiliar de fiscal Lucas Maggio presentó las pruebas reunidas y solicitó la prisión preventiva. El juez consideró acreditado el riesgo de fuga y la gravedad del hecho, por lo que ordenó que Vila permanezca detenido.
Ahora, tras más de una década de evasión, “El Elegido” Vila vuelve a enfrentar a la Justicia tucumana, acusado del homicidio agravado de Lucía Jerez. El caso, que había quedado impune, retoma su curso judicial con la posibilidad concreta de llegar finalmente a juicio.




