El inicio de la pretemporada en Atlético Tucumán dejó un impacto inesperado en Ojo de Agua. Mientras el plantel trabajaba bajo las órdenes de Hugo Colace y se anunciaba el regreso de Leonel Di Plácido como refuerzo, una noticia sacudió al ambiente “decano”: Guillermo “Bebe” Acosta confirmó que no será tenido en cuenta para la temporada 2026.
La jornada transcurría con normalidad hasta pasadas las 20, cuando el capitán abandonó el complejo en su vehículo, visiblemente diferente al ánimo distendido que había mostrado minutos antes. Cuando parecía que se marcharía sin brindar declaraciones, decidió frenar ante la insistencia de la prensa. Sus palabras confirmaron las sospechas: “No voy a seguir”, afirmó con la voz contenida.
Una decisión que lo tomó por sorpresa
Acosta, de 37 años, reconoció que fue el propio entrenador quien le comunicó la decisión técnica. “No me lo esperaba porque tengo contrato por un año más. Pero también sabía que esto viene por otro lado. Hugo en esto no tiene nada que ver, así que estoy agradecido con todo el cuerpo técnico”, explicó.
El histórico capitán aseguró que, pese al golpe emocional, quiere mantener la calma y cerrar su salida en buenos términos. “Ahora tengo que arreglar la rescisión del contrato para irme bien, porque no me quiero ir mal ni con el presidente ni con nadie del club”, dijo.
Consultado sobre si la determinación responde a motivos deportivos, fue categórico: “No sé… hay que preguntarle a ellos. A mí, Hugo fue el que dio la cara. Pero me voy tranquilo porque sé que no es por esa parte”.
El futbolista dejó entrever que la relación con la dirigencia estaba quebrada desde hace meses. “Todos sabemos cuál es el problema. El tema es que mandan a un entrenador a decirme que no me van a tener en cuenta. Pero no quiero irme mal con nadie. Quiero arreglar de la mejor manera y poder irme bien”, expresó.
El episodio que marcó un antes y un después ocurrió en la derrota 2-1 ante San Lorenzo, en El Monumental. Tras ese encuentro, Acosta había dejado al descubierto diferencias con la comisión directiva. Días después, volvió a apuntar contra los dirigentes: “El señor Ignacio Golobisky debería salir a pedir disculpas. La gente tiene que saber quién rompió el acuerdo. Están más preocupados por las elecciones que por lo que pasa en el club”, disparó tiempo atrás en referencia al conflicto por premios y al fin del ciclo de Lucas Pusineri.
Un referente absoluto del “Decano”
Con 376 partidos oficiales —el jugador con más presencias en la historia del club—, 30 goles, 20 asistencias y participación directa en la etapa más exitosa de Atlético Tucumán, “Bebe” Acosta es una figura indiscutible para la hinchada.
Al enterarse de que no seguiría, el mediocampista no ocultó su tristeza. “Gracias por todos los años, por el apoyo. Me quedo con los mejores momentos del club. Es difícil salir así, pero estoy tranquilo”, expresó. Y añadió: “Ahora llego a casa con una noticia para mi señora y mi hijo… pero si tengo que trasladarme a otra provincia o donde me toque jugar, lo voy a hacer”.
Acosta descartó cualquier posibilidad de colgar los botines. “Me queda rato. Me siento bien, eso es lo importante. Sé que estoy a la altura porque lo demostré en los últimos tres partidos”, aseguró.
Mientras tanto, la dirigencia deberá negociar la rescisión del contrato, que vence recién en diciembre de 2026. Si no hay acuerdo, el club que desee incorporarlo deberá pagar por su ficha.
La noticia golpeó fuerte en el mundo Atlético. La decisión de no contar con uno de sus máximos ídolos abre una nueva etapa cargada de incertidumbre, tanto para el jugador como para el club. Lo que parecía un día más de pretemporada terminó en una verdadera bomba que todavía resuena en Ojo de Agua.



