El exgobernador de Tucumán, José Alperovich, comenzó este miércoles a cumplir su prisión domiciliaria en un departamento del exclusivo barrio porteño de Puerto Madero, tras abandonar el penal de Ezeiza. La medida fue autorizada por el juez Juan Ramos Padilla, quien lo condenó en 2024 a 16 años de prisión por múltiples delitos de abuso sexual agravado contra una sobrina y excolaboradora.
El traslado se concretó luego de que la defensa del exmandatario cumpliera con los requisitos judiciales: el pago de una caución real de $400 millones, la colocación de una tobillera electrónica y la aceptación de una serie de restricciones estrictas. Entre ellas, se le prohíbe cualquier tipo de contacto, directo o indirecto, con la víctima o su entorno, así como realizar declaraciones públicas que puedan afectarla.
La prisión domiciliaria no es un beneficio excepcional ni un acto de clemencia, sino una herramienta legal que se aplica bajo condiciones muy específicas, fundamentó el juez Ramos Padilla.
El lugar elegido: epicentro de la polémica
El departamento donde Alperovich cumplirá su condena está ubicado en el Complejo Zencity, en la calle Rosario Vera Peñaloza 599, en la Torre Zafiro. Se trata del mismo inmueble que fue mencionado en la causa como uno de los escenarios donde ocurrieron los abusos sexuales. Esta decisión generó controversia entre organismos de derechos humanos y colectivos feministas, que exigen garantías para el cumplimiento estricto de las restricciones impuestas.
Condiciones del arresto domiciliario
- Tobillera electrónica con monitoreo permanente.
- Prohibición de contacto con la víctima y su entorno.
- Informe mensual sobre su situación judicial.
- Supervisión judicial constante.
- Inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
El exgobernador, de 70 años, accedió al beneficio por su edad y su estado de salud deteriorado, que incluye problemas de movilidad y una enfermedad pulmonar crónica. Durante su detención en Ezeiza, su defensa había solicitado en dos ocasiones la morigeración de la pena, pero ambas fueron rechazadas hasta ahora.
Un caso que sigue en la mira
Alperovich fue hallado culpable de nueve hechos de abuso sexual, seis de ellos con acceso carnal, cometidos entre 2017 y 2018 en Tucumán y Buenos Aires. La víctima, su sobrina segunda, trabajaba como su secretaria durante su campaña para volver a la gobernación. La sentencia fue apelada, pero mientras tanto, el exmandatario deberá cumplir su condena bajo estricta vigilancia.