San Miguel de Tucumán registró 57 casos positivos de alcoholemia en apenas 24 horas, durante los operativos realizados entre la madrugada del viernes 29 y el sábado 30 de agosto. La Secretaría de Movilidad Urbana retuvo los vehículos, aplicó multas económicas elevadas y envió las unidades al corralón municipal. Cuatro conductores se negaron a firmar el acta y uno intentó escapar del control.
Benjamín Nieva, titular del área, calificó la situación como “altamente preocupante” y advirtió que algunos niveles de alcohol en sangre superaron los 3 gramos. Además, denunció que muchos conductores desobedecen las órdenes, avanzan sobre los conos, abandonan la documentación y se fugan sabiendo que están alcoholizados.
El municipio refuerza su política de “alcohol cero” y exige que los conductores cedan el volante si consumieron bebidas. Nieva remarcó que los controles no son esporádicos y que el objetivo consiste en sacar de circulación a los conductores desaprensivos. La violencia en los operativos también preocupa: los agentes enfrentan agresiones verbales y físicas en cada jornada.
El fenómeno expone una problemática urbana que mezcla imprudencia, consumo excesivo y falta de conciencia vial. El municipio pide colaboración ciudadana y recuerda que las denuncias pueden realizarse al 3813195131.
