En la antesala de las elecciones legislativas bonaerenses del 7 de septiembre, los bancos ajustaron fuertemente las tasas de interés para plazos fijos a 30 días. Entre julio y septiembre, los rendimientos subieron más de 15 puntos porcentuales en promedio, lo que modificó de forma significativa las ganancias de los ahorristas.
El Banco Nación, por ejemplo, pasó de pagar 30,5% en julio a ofrecer 47% en septiembre. El Banco Macro y el Credicoop igualaron esa cifra, mientras que entidades como CMF y Reba escalaron hasta el 55%. Estas subas implican que un depósito de $1.000.000 genera entre $12.000 y $20.000 más en un mes, según el banco elegido.
La reacción del mercado se vincula directamente con las expectativas electorales. Operadores financieros describieron la jornada del 5 de septiembre como una “rueda electoral”, marcada por compras de bonos y acciones, a pesar de la volatilidad cambiaria. El presidente Javier Milei habló de un “empate técnico” en la provincia, lo que fue interpretado como una señal de estabilidad política inmediata.
En paralelo, el Tesoro intervino en el mercado cambiario con ventas de divisas por unos USD 400 millones, buscando contener la suba del dólar mayorista, que cerró en $1.362,50. Los dólares financieros también mostraron presión, mientras que el informal retrocedió levemente a $1.365.